sábado, 28 de julio de 2018

SÁBADO COLONIAL

Esta mañana de sábado amanecimos en la casa de las Madres Concepcionistas que tienen su casa en el barrio de los Frailes, en la capital, Santo Domingo, tras el descanso y un desayuno estupendo fuimos a visitar la escuela "La Inmaculada" de Fe y Alegría nos la enseñaron Madre Liliana y Madre Dominga, una gran escuela con más de 1500 alumnos, desde los 5 años hasta los 18. Un colegio muy acogedor por la cantidad de plantas y árboles que allí existen.


Tras la visita a la escuela, nuestra experta conductora madre Dayanna acompañada de Madre Clara y Madre Íngrid, nos llevó a visitar la Cueva de los tres ojos, dónde están el lago de azufre, el lago de las damas y el lago denominado la nevera, que es una la formación rocosa con vegetación y agua muy similar a la cueva de los Jameos del agua en Tenerife.


En el lago de los Zaramagullones cogimos una barcaza para atravesarlo de punta a punta para conocer uno de los lugares más paradisíacos de la isla, donde se rodó varias escenas de la película de Tarzán.


Seguidamente con la furgoneta hemos ido hasta el faro de Colón, homenaje de los isleños a Cristobal Colón. El Papa Juan Pablo II lo visitó en 1992, en el quinto aniversario del descubrimiento de la isla. Aún se conserva el Papa móvil.


La comida la tuvimos en un establecimiento cuyo dueño era un mallorquín. Nuestra sorpresa fue que siendo español la comida dominicana que prepara eses buenísima.
Después de comer fuimos a conocer el mercado modelo para comprar algún que otro recuerdo de artesanía típica de la isla.
Más tarde, dimos un paseo por la zona Colonial, visitando el monumento a los tres padres de la República: Duarte, Sánchez y Mella.


Paseando, hemos llegado hasta el Museo del cacao donde hemos descubierto que hay tres árboles distintos que producen cacao. Como curiosidad decir que las flores nacen en su tronco y son polinizadas por una minusminú mosca que tiene su hábitat en el propio suelo donde crece el árbol del cacao.
Llegamos andando hasta la plaza donde se ubica la casa de Diego de Colón, hijo de Cristóbal Colón, que también nos ha recordado a la plaza española del pueblo de Trujillo.


Al final del dia, decidimos tomarnos unos jugos en un lugar con unas vistas increibles al río Ozama impresionantes.


Empezábamos el camino de vuelta a casa cuando una lluvia caribeña nos sorprendió, pero esto no fue motivo para amedrentarnos, más bien una razón más para disfrutar del dia. Hasta nos pusimos a bailar bajo la lluvia.

Ya en la casa nos estaban esperando Madre Lilian, madre Dominga y Madre Marxis con la que compartimos una cena típica con productos españoles, acompañados de riquísimos aguacates. Ha sido un día muy largo pero muy agradable y provechoso. Aquí terminamos otro sábado felices, disfrutando de la historia y cultura de esta hermosa isla.